martes, 28 de julio de 2009

26/7/09



Y fue esa calurosa noche del mes de julio, allí, tumbadas en esas blancas camas, en esa maldita discoteca repleta de mamarrachos, donde decidimos que juntas estaríamos mejor que con nadie. Y así, nos juramos amor eterno...y viviríamos felices y comeríamos perdices... o nos comeríamos a quien osara molestar nuestra paz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario